martes, 27 de septiembre de 2016

Historia de Pedro Abad

Fundado en el siglo XIII por el abad Pedro de Meneses como hospital de campaña, durante la conquista del valle del Guadalquivir por el rey Fernando III el Santo.
- Heráldica:
El origen de Pedro Abad, tal y como lo conocemos hoy día, procede de la conquista, en época musulmana, de Córdoba por el Rey Fernando III. Cuenta Ramírez y de las Casas Deza, y aportadas por Osuna y Cabrera, en la trascripción de las copias de un manuscrito aparecido en la ermita del Santísimo Cristo de los Desamparados de Pedro Abad, que el monarca creó a finales del 1235, en el lugar que hoy ocupa la población, un campamento convertido después en hospital, donde se instaló para ofrecer auxilio espiritual el abad Pedro de Meneses, que traía consigo un crucificado. Los diversos hechos milagrosos atribuidos a esta imagen hicieron que Fernando III mandase construir una ermita y casas para los que quisieran habitar en dicho lugar, que estaban exentos de todo pecho o tributo.
La vinculación del abad Pedro de Meneses a la población es de una importancia vital. El Abad Pedro, de origen gallego, nació en Campobecerros, y siendo párroco en Santa María de la Mama es convencido para participar en la conquista del sur de la península, por lo que se traslada con una imagen de Cristo Crucificado, que poseía por herencia familiar; imagen que es venerada con el nombre de Santísimo Cristo de los Desamparados. Lo anteriormente expuesto y la existencia de una fuente en el lugar, que formaba parte de un camino bastante transitado en el siglo XIII, darían el nombre primitivo a la recién creada aldea: Fuente de Per Abad, según consta en un documento fechado en 1272, (se refiere a su iglesia, la cual pertenecía al arcedianato de Córdoba, mencionando el lugar como Fuente de Per Abad), donde aparece este topónimo.
En sus inicios la aldea se encontraba en la ruta principal por oriente del Valle del Guadalquivir y pertenecía a Algallarín, pronto, con motivo de la importancia que iba adquiriendo por los referidos milagros y hechos extraordinarios ocurridos, se le señalarían sus propios términos.

 >

No hay comentarios:

Publicar un comentario